Tú, sí, tú que lees estas letras... ¿cuántos años tienes?
¿Cuántos dijiste tener la última vez que mentiste?
¿Yo? Yo ya ni me los quito, me delata el tono de voz, la postura orgullosa, mi novedoso pseudo-poder adquisitivo, mi ojera ambulante y mi preferencia por el vino y el whisky, a diferencia del ponche de granada de hace unos años...
Hace mucho que puedo oficialmente ponerme peda y comprar cigarros. Hace no tanto aún dudé hacia dónde andar, qué contestar, cómo vestirme.
Brinco en la web sin ton ni son, como queriendo saber dónde me ubico y qué clase de sitios "debería" visitar, y siempre regreso a los que me hacen sonreír, nunca me estaciono en los que hablan de estupideces treintañeras.... jajaja... sí... exacto, esos que hablan de mí.
Prefiero un concierto y una chelas.
Busco en los catálogos impertinentes.
Quiero nunca dejar de ser la que he sido, y creo que hasta me da miedo dejar de ser la que no soy... la que ya no soy.
Si, dentro de poco será mi cumpleaños... y pa acabarla de chingar es el diez de mayo, y este año será el primero que lo festeje de madre... como una hija de mi pinchi madre... ¡salud!
¿Cuántos dijiste tener la última vez que mentiste?
¿Yo? Yo ya ni me los quito, me delata el tono de voz, la postura orgullosa, mi novedoso pseudo-poder adquisitivo, mi ojera ambulante y mi preferencia por el vino y el whisky, a diferencia del ponche de granada de hace unos años...
Hace mucho que puedo oficialmente ponerme peda y comprar cigarros. Hace no tanto aún dudé hacia dónde andar, qué contestar, cómo vestirme.
Brinco en la web sin ton ni son, como queriendo saber dónde me ubico y qué clase de sitios "debería" visitar, y siempre regreso a los que me hacen sonreír, nunca me estaciono en los que hablan de estupideces treintañeras.... jajaja... sí... exacto, esos que hablan de mí.
Prefiero un concierto y una chelas.
Busco en los catálogos impertinentes.
Quiero nunca dejar de ser la que he sido, y creo que hasta me da miedo dejar de ser la que no soy... la que ya no soy.
Si, dentro de poco será mi cumpleaños... y pa acabarla de chingar es el diez de mayo, y este año será el primero que lo festeje de madre... como una hija de mi pinchi madre... ¡salud!
4 comments:
exactamente, yo aún me siento chiquita para algunas cosas. ¿Casarme? cuanto tenía 15 decía que a los 24 estaría buena pa'l matrimonio. ¿Hoy? noooo, a mis 28 soy muy pequeña para pensar en eso.
Cuando hablo de canciones ochenteras con güeyes de 24, se me hace extraño que no se "acuerden" quién era Boy George o que no se sepan del todo las canciones de Timbiriche...
Me restriegan en la cara mi edatttt.
Campamoch, pero uno es joven por dentro. Lo seguimos siendo. Sólo te recuerdo, para darnos un latigazo más, que te conocí cuando tenías 19... y yo la tierna edad de 17.
JJAJJAJAJJAJAJJAAJ
pinchi campamochhhhhh!!
No me acordabaaaaa... hace entonces casi 10 anónimos años que bailamos pasito tun-tún? wow... y yo queriéndome aferrar a la juventú...
¡Somos una vegetalitas! ¡de esas con mucha fibra y pocas calorías!
No acostumbro (de hecho no lo hago) quitarme la edad. De repente me agobia el saberla (ahora con mis recientes 23 años)...esperen, sí he mentido de mi edad, para sacarme de encima a los enfadosos que ofrecen tarjetas de crédito.
Así es mi venadita de la serranía!!
Es como uno que piensa certeramente que es el cumpleañero del mundo, sin embargo es obvio que al mismo tiempo todos envejecen pero nunca lo reconoces, hasta en eso somos egoístas jajaja solemos creer que los demás siempre permanecen en la misma edad; hasta que fugazmente ha pasado una década y cómo dice Jules cuando platicas con chavitos que nacieron en los 80´s pero que no tuvieron conciencia de la época, eso sí que es un deadline. Besos choyeros
Post a Comment