~~ eL cUerpO q cAmbia ~~

De pronto el horizonte plano toma una forma curva insospechada, ligera, pero franca. Toco en el calor de verano mi piel y suda, se siente más cálida que de costumbre, por ratos hierve. Mi cuello huele diferente, los dedos de mis pies dejan crecer mis pasos. Mi espalda se vuelve más larga pero nunca inalcanzable. Mis ojos parecen colorearse de un marrón que inspira sueño, pero los sueños me abrazan cada noche con un regocijo que me despierta. Al levantarme de madrugada, mi cuerpo entero se tambalea, siente más sed que de costumbre y me lleva a lugares perdidos donde me cobijo una vez más y me abrazas. Sientes esa forma rara que sin querer ahora adopta mi cintura.

Parece que los lunares se me cambiaran de lugar, que los párpados me dieran más espacio para colorear como lienzos, pero aun no me acostumbro a ser la misma y cada día otra diferente que descubro.

De pronto, con la mano bajo el ombligo, algo tiembla. Se acelera mi corazón y se que estás ahí. ¿Alguien te ha visto? ¿Cómo fue que trepaste a mi alma y te alojaste ahí? Me abraza la certeza de saber que estás ahí. ¿Cómo fue que habitaste mi cuerpo y estás creciendo ahí? Sí, ahí estás. Y aquí estoy yo dejándome transformar con miedo, pero con una curiosidad que me mata.

Te cedo mi cuerpo, este cuerpo cambiante y lo pongo a merced de una vida que de dos se hizo tres.